El entrenador del Athletic Club, Ernesto Valverde, ha evitado autoproclamarse como favorito en la final de la Copa del Rey contra el Mallorca, que se llevará a cabo en La Cartuja. Por su parte, Javier Aguirre, técnico del Mallorca, se ha mostrado humilde al afirmar que no hay víctimas ni favoritos en este encuentro. Ambos equipos llegan con opciones de llevarse el título, según Aguirre: «Todo eso cuando ruede el balón no importa nada. Hemos llegado dos equipos que lo hemos merecido. Esto es una final, estamos aquí para ganarla».
El Athletic Club, que ha perdido las cinco finales de Copa que ha disputado, busca romper esa racha negativa. El jugador Oscar de Marcos ha destacado la importancia de jugar con intensidad y presión alta, como lo hacen en San Mamés. Por su parte, el equipo ha desplazado a Sevilla a alrededor de 70,000 aficionados para apoyarlos en la final.
Valverde ha señalado que el resultado de la final no influirá en su decisión sobre su futuro, ya que su contrato finaliza el próximo 30 de junio. Reconoce la importancia del partido y lo que significaría ganar: «Sé lo que significa este partido para todos si podemos ganar. Las finales están señaladas en el calendario para los que pueden llegar. Claro que es un partido importante para mí».
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