El 13 de marzo de 2025, el estadio de San Mamés fue escenario de incidentes entre los aficionados del Athletic Club y de la Roma, que resultaron en tensiones y enfrentamientos. Tras el término del partido, los seguidores italianos fueron retenidos durante aproximadamente una hora y media antes de poder abandonar el recinto deportivo. En las cercanías, se registraron cargas por parte de la Ertzaintza y la quema de contenedores.
Incidentes tras el partido
Los primeros momentos de tensión se desataron cuando los aficionados de la Roma comenzaron a salir del estadio. La Ertzaintza intervino para desalojar a grupos de hinchas que permanecían en la explanada, lo que llevó a enfrentamientos y al lanzamiento de objetos. Según los informes, varios radicales del Athletic arrojaron objetos a las fuerzas de seguridad, lo que provocó la intervención de los agentes.
Despliegue de seguridad y daños
A lo largo de la noche, se registraron contenedores volcados y quemados en la calle José María Escuza, aunque los Bomberos lograron controlar la situación sin que se reportaran daños a vehículos cercanos. A pesar de la tensión, se desconoce el número de heridos, aunque se observaron ambulancias en la zona.
Control de la situación
El dispositivo de seguridad se mantuvo activo en las áreas cercanas a San Mamés, con un notable despliegue de agentes en Pozas e Indautxu. La situación se calmó gradualmente, pero los momentos de tensión iniciales generaron preocupación entre los asistentes.
Apoyo a la afición del Athletic
En el contexto del partido, la afición del Athletic Club mostró un gran apoyo a su equipo, celebrando los goles y animando a los jugadores, lo que contrastó con los incidentes que se produjeron al final del encuentro.
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