
El Correo
La afición del Athletic se divide: «El equipo, señores, no se toca»
Conflicto en la Grada del Athletic Club: Aficionados Divididos
En un giro inesperado en la historia del Athletic Club, un grupo reducido de aficionados está obstaculizando la animación de un sector mayoritario durante los partidos. Esta situación, inédita en el club, ha generado tensiones que afectan el ambiente en San Mamés.
Antecedentes del Conflicto
Tradicionalmente, las disputas entre hinchas del Athletic han girado en torno a jugadores, entrenadores y decisiones del club. Sin embargo, la actual confrontación se centra en la animación y el apoyo al equipo. Unai Simón, portero del equipo, ha instado a quienes no apoyan al equipo a quedarse en casa, subrayando que su presencia es perjudicial.
Reacción del Club
La directiva, liderada por Jon Uriarte, ha tomado medidas firmes, prohibiendo la entrada a individuos que han coaccionado a otros aficionados para cesar en su apoyo. El club enfrenta multas por los insultos provenientes de un sector del Fondo Norte, lo que ha llevado a la identificación de los infractores y a la resistencia de estos a ser sancionados.
La Respuesta de la Afición
La situación ha generado un llamado a la unidad entre los aficionados, quienes son instados a animar al equipo desde todos los rincones del estadio. La solución propuesta es que la hinchada se enfoque en el apoyo al Athletic, dejando de lado las tácticas de intimidación.
Preguntas y Respuestas Relevantes
¿Qué está ocurriendo en la grada del Athletic Club?
Un grupo reducido de aficionados está impidiendo que otros animen al equipo durante los partidos.
¿Cuál es la causa del conflicto?
El conflicto se origina por las multas que el club recibe debido a insultos lanzados desde el Fondo Norte.
¿Qué medidas ha tomado la directiva del Athletic?
La directiva ha prohibido la entrada a personas que coaccionan a otros aficionados y está identificando a los infractores.
¿Cómo pueden los aficionados resolver esta situación?
Se les anima a unirse y apoyar al equipo desde todos los sectores del estadio, en lugar de recurrir a tácticas de intimidación.
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