El Athletic Club en la encrucijada del verano
Este verano, el Athletic Club se encuentra en una situación delicada, con Nico Williams disfrutando de sus vacaciones en Ibiza. La presencia de Deco, director deportivo del FC Barcelona, en la isla ha encendido las alarmas en el club bilbaíno, ya que se rumorea que busca cerrar un acuerdo con el joven extremo. Mientras tanto, Flick, que también se encuentra en Formentera, podría unirse a las negociaciones en cualquier momento.
Un futuro incierto para Nico
A pesar de que el Athletic intenta que Nico rechace nuevamente al Barcelona, la situación es más complicada que en ocasiones anteriores. El jugador ha mostrado interés en el club catalán en tres ocasiones, pero hasta ahora ha optado por permanecer en el Athletic. La estrategia del club es ofrecerle una renovación que lo convierta en el mejor pagado de la plantilla, aunque la cláusula de 135 millones de euros que firmó su hermano parece un obstáculo difícil de superar.
El Barça, por su parte, ha reavivado su interés en Nico, quien había dejado claro su deseo de jugar en el equipo azulgrana. Con la maquinaria del club en marcha, se están evaluando las posibilidades de pago de la cláusula y la normativa de inscripción.
Consecuencias de una decisión
El Athletic observa con preocupación el desarrollo de los acontecimientos. Si Nico decide unirse al Barcelona, el club bilbaíno podría recibir cerca de 60 millones de euros para reinvertir en nuevos fichajes. Con la llegada de Areso y Robert Navarro, además de la búsqueda de un central y un delantero, el futuro del Athletic podría cambiar drásticamente dependiendo de la decisión del joven talento.
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