En el inicio de la temporada 2024-25, el jugador Sancet del Athletic Club se presentó como una figura clave en los momentos decisivos de la campaña anterior, destacándose en la Copa del Rey en partidos importantes como los cuartos de final contra el FC Barcelona, las semifinales ante el Atlético de Madrid y la final contra el Mallorca. Sin embargo, su rendimiento en la segunda mitad de la temporada pasada no fue el esperado, lo que ha llevado a un enfoque renovado en su juego para recuperar su dinamismo y efectividad en el área rival.
En el primer partido de la nueva temporada, el Athletic se enfrentó al Getafe, pero el equipo comenzó de manera poco inspirada, mostrando dificultades para mantener la posesión del balón y avanzar en el campo. El Getafe, bien organizado en un esquema 4-1-4-1, logró neutralizar las acciones del Athletic, con Nabil desempeñando un papel crucial al conectar la defensa con el medio campo y marcando a Sancet de cerca. Durante los primeros minutos, el Athletic no logró crear oportunidades significativas en el área rival.
El entrenador del Athletic, Valverde, mostró signos de preocupación y decidió realizar ajustes tácticos, reconfigurando la alineación para mejorar el control del juego. Con Vesga como ancla en el medio campo y Sancet desplazado a la izquierda, el equipo logró generar un desajuste en la defensa del Getafe. Esto permitió que Yeray asistiera a Guruzeta, quien, tras recibir el balón, disparó desde la media luna y anotó el primer gol de la temporada.
Sin embargo, tras el descanso, el Athletic se desvaneció en términos ofensivos, con escasas intervenciones destacadas de jugadores como Berenguer y Nico Williams, quien ingresó en la segunda mitad. El Getafe, por su parte, continuó presionando y estuvo cerca de igualar el marcador en varias ocasiones, incluyendo un tiro al poste de Peter Federico y una intervención clave de Padilla ante Aleñá. Finalmente, el equipo madrileño logró empatar tras un córner, aunque el gol de Sancet fue anulado, lo que dejó al Athletic con un sabor agridulce al finalizar el encuentro con solo un punto en su debut liguero.
En resumen, el Athletic Club no pudo capitalizar su ventaja inicial y se encontró con un Getafe que, a pesar de sus limitaciones, mostró una sólida defensa y capacidad de respuesta, lo que dejó al equipo bilbaíno con la necesidad de mejorar su rendimiento en los próximos partidos.
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