La marea zurigorri ha invadido Sevilla con fuerza, con al menos 50,000 seguidores del Athletic desplazados para la final de la Copa del Rey. El viaje, tanto por aire como por tierra, ha sido intenso, con algunos aficionados recorriendo los 863 kilómetros de un tirón. La presencia rojiblanca en las calles sevillanas ha sido notable desde el jueves, culminando en un gran pico de llegadas ayer. Los saludos entre vehículos con distintivos del Athletic eran constantes, reflejando el sueño compartido de ver al equipo levantar la Copa.
La ilusión y el deseo de presenciar una final han generado un ambiente de entusiasmo y expectación entre los aficionados, que no han escatimado en mostrar su apoyo con camisetas, banderas y pegatinas. Las palabras de ánimo y esperanza se repetían en cada parada: «Esta vez ya toca ganarla«. A pesar de la emoción palpable en Sevilla, muchos seguidores que no pudieron asistir también se suman al fervor desde la distancia. Se avecina un día histórico para el Athletic Club.
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