El Athletic Club de Bilbao se mostró en gran forma física y futbolística durante la final de la Euskal Herria Txapela, celebrada el pasado sábado contra Osasuna en el estadio de Lasesarre. El equipo rojiblanco dominó el encuentro de principio a fin, logrando una victoria de 2-1 gracias a los goles de Álvaro Djaló e Iñaki Williams. A pesar de la victoria, el Athletic no logró controlar completamente a un Osasuna que, bajo la dirección de Ernesto Valverde, alineó a la mayoría de sus titulares.

El partido fue significativo para el Athletic, que se encuentra en la fase final de su preparación para la nueva temporada. En este sentido, el equipo se enfrentará a rivales de la Champions League, como Aston Villa y Stuttgart, en los próximos amistosos. Desde el inicio del partido, el Athletic mostró una clara superioridad, especialmente en el centro del campo, donde Beñat Prados y Ander Herrera destacaron por su desempeño. Sin embargo, el equipo tuvo un pequeño desliz defensivo que permitió a Rubén García de Osasuna empatar el partido momentáneamente.

Este encuentro fue crucial para disipar las dudas que habían surgido tras un inicio de pretemporada poco convincente, donde el Athletic solo había anotado cuatro goles en sus primeros cuatro amistosos. Valverde expresó su satisfacción tras el partido, señalando que la intensidad del juego fue un buen indicador del estado de preparación del equipo, que se asemeja a lo que se espera en la liga.

El Athletic ha mejorado notablemente desde sus primeros amistosos, donde sufrió derrotas y mostró dificultades en la definición. La victoria ante Osasuna fue un paso importante hacia la consolidación del equipo, que busca mantener el buen rendimiento de la temporada anterior, en la que lograron un título de Copa y un quinto puesto en la liga.

Valverde también se mostró optimista respecto a la recuperación de jugadores clave, como Ruiz de Galarreta, y la posible incorporación de los internacionales Dani Vivian y Nico Williams, quienes están en proceso de regresar al equipo tras sus compromisos. El entrenador destacó la importancia de mantener un equilibrio entre el ataque y la defensa, y confía en que el equipo pueda replicar y mejorar la dinámica ofensiva del año pasado.

Con la liga a la vuelta de la esquina, el Athletic se prepara para su debut el 15 de agosto contra el Getafe en San Mamés. La última semana de preparación incluirá entrenamientos a puerta cerrada y los mencionados amistosos contra el Aston Villa y el Stuttgart, que servirán como pruebas finales antes del inicio de la competición oficial.

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Josu Roman