Ernesto Valverde, míster del Athletic Club, reconoció la falta de calma en la definición tras la victoria ante el Qarabag en la Champions. Destacó el buen estado de Nico Williams y la importancia de mantener la paciencia en el equipo.
Valverde reflexiona sobre el partido
Tras la victoria reparadora en la tercera cita de la Champions, Ernesto Valverde se mostró satisfecho, aunque admitió que el equipo necesitaba más “sangre fría” para definir las ocasiones. “Teníamos que evitar desarmarnos para tener una segunda opción de ataque y en gran medida lo hemos conseguido”, relató.
Un impulso anímico
“Es un impulso anímico para nosotros, para el público, quitarnos la sensación de que tienes 0 puntos”, afirmó Valverde.
El entrenador también destacó el gol del empate antes del descanso como un momento clave. Guruzeta brilló con dos goles, lo que es crucial para la confianza de los delanteros. “Si no marcan, deben estar cerca del gol”, comentó.
El estado de Nico Williams
Sobre Nico Williams, quien había estado un mes fuera de los entrenamientos, Valverde lo vio “bien” y lo describió como “desequilibrante”. “Le pedimos que lo intente, es capaz de liberar el balón porque se lleva a tres rivales”, añadió.
Valverde también mencionó la lesión de Iñaki Williams, indicando que habrá que “esperar a mañana” para más detalles.
El Athletic busca mejorar su rendimiento en la Champions tras esta victoria y mantener la confianza en el equipo.
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