El Club Atlético Osasuna enfrenta una crisis de rendimiento en la temporada 2023-2024, generando inquietud entre aficionados y prensa. El equipo, dirigido por Alessio Lisci, se encuentra en la duodécima posición de La Liga, con solo tres puntos de ventaja sobre la zona de descenso.
Un cambio de entrenador sin éxito
La situación actual de Osasuna es el resultado de un cambio de entrenador que ha dejado a muchos cuestionando la decisión. Braulio Vázquez, director deportivo, eligió a Lisci, un técnico sin experiencia en la élite, para reemplazar a Vicente Moreno. Este es el tercer relevo en el banquillo en tres años, tras la salida de Jagoba Arrasate.
Desempeño en la liga
Osasuna ha tenido un inicio de temporada complicado, con un balance de un empate y dos derrotas en sus últimos partidos. La falta de puntos en los encuentros fuera de casa ha dejado al equipo en una situación precaria. Lisci ha afirmado que «a Osasuna le faltan puntos, no méritos», insistiendo en que la dinámica actual es reversible.
«La afición navarra cree que mientras El Sadar sea inexpugnable, la cosa irá bien.»
Expectativas y desafíos
El próximo partido contra el Athletic Club será crucial para Lisci, quien necesita una victoria para aumentar su credibilidad. La afición confía en jugadores como Budimir y Aimar Oroz, pero la falta de inspiración en el ataque es preocupante. La llegada de Javi Galán podría ser un alivio, pero el equipo debe mejorar su rendimiento en las segundas partes.
Osasuna busca revertir su situación y recuperar la confianza de su afición en la presente temporada.
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