En la capital italiana, la afición del Athletic Club se encuentra en plena euforia a pocas horas del crucial partido de octavos de final de la Europa League. El Estadio Olímpico se prepara para recibir a miles de seguidores, creando un ambiente vibrante en Roma.
La llegada de los aficionados
Desde temprano en la mañana, los hinchas han comenzado a disfrutar del ambiente romano. La familia Zalbidea, por ejemplo, se dirige al estadio luciendo sus bufandas rojiblancas. Sin embargo, no todos han tenido un viaje sin contratiempos. Un grupo de aficionados que partió de Bilbao hacia Barcelona sufrió un retraso que les hizo perder su conexión a Roma. Tras una larga espera de casi doce horas, finalmente lograron abordar un tren rápido hacia el centro de la ciudad.
Optimismo entre los seguidores
Los primeros hinchas que llegaron al punto de encuentro en Roma han compartido su optimismo. Tres jóvenes, dos de ellos provenientes de Navarra y uno de La Rioja, expresaron su deseo de que el Athletic obtenga un resultado positivo en el partido. A pesar de algunos inconvenientes, como identificaciones por parte de la Policía italiana, la mayoría de los aficionados han reportado un ambiente cordial y sin incidentes.
Medidas de seguridad y presencia institucional
El presidente del Athletic, Jon Uriarte, también se encuentra en Roma, disfrutando del ambiente previo al encuentro. En respuesta a la situación, la Policía italiana ha intensificado las medidas de seguridad, especialmente en áreas donde se han detectado grupos de ultras de la Roma.
Expectativas en el Estadio Olímpico
El Estadio Olímpico espera recibir a 61,000 aficionados, de los cuales más de 1,000 serán del Athletic, ubicándose en la curva norte, lejos de la zona de radicales. La afición rojiblanca ha comenzado a hacer sentir su presencia en la ciudad, con peñas como la Piru Gainza de Basauri, que han viajado para apoyar al equipo.
Últimos preparativos antes del partido
A medida que se acerca la hora del partido, los aficionados que aún se encuentran en Barcelona esperan poder llegar a tiempo para disfrutar del encuentro, aunque lamentan no poder explorar Roma como habían planeado. Esta situación ha generado nerviosismo entre algunos, que cruzan los dedos para que sus vuelos no sufran más retrasos.
Con un ambiente cargado de ilusión y expectativa, el Athletic Club se prepara para un importante desafío en la Europa League.
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